Mi opinión personal e intransferible ante la declaración auspiciada por Associació Juristes Valencians junto al conjunto de asociaciones pro custodia compartida en la Comunitat Valenciana, expresada con todos mis respetos y reconociendo su representatividad, es que han caído en la trampa del nacionalismo.
En opinión de esta humilde afiliada a Cs, no se pueden matar moscas a cañonazos, y pretender aprobar una reforma constitucional exprés para dotar de competencias a las comunidades autónomas y que así puedan legislar sobre competencias compartidas, es un sueño irrealizable. No se dan en estos momentos las condiciones políticas necesarias para que se produzca el consenso imprescindible para una reforma constitucional. Si no nos ponemos de acuerdo ni en el nombre de las calles, cómo se va a reformar la Constitución.
El mejor camino, y el más corto, es sin duda la Ley estatal de Custodia Compartida que Ciudadanos ha propuesto en el Congreso, que incorpora las justas reivindicaciones de los afectados, en su mayoría miembros de estas asociaciones. La reforma constitucional es imposible sin el concurso de todas las fuerzas políticas representadas, y muy especialmente del Partido Popular, mientras que con o sin ellos, esperemos que con ellos, la Ley estatal de Custodia Compartida puede salir perfectamente adelante en un tiempo razonable.
Comprendo que las familias afectadas se encuentran en una situación de urgencia, toda mi solidaridad con ellas, pero no valen atajos, lo que las fuerzas nacionalistas valencianas les propusieron, la inconstitucional Ley Valenciana de Custodia Compartida, y lo que les proponen ahora, la fantástica e irrealizable reforma constitucional, no hace más que alejarles de sus objetivos. No es mi opinión, lo acabamos de ver.
En cambio, la reforma del Código Civil incluida en el acuerdo de investidura y la Ley estatal de Custodia Compartida cumple totalmente sus expectativas, aunque lamentablemente haya que esperar a que se cumplan los plazos legales, que son inevitables para que no la tumbe el máximo tribunal, u otro cualquiera, como ha pasado con la valenciana. Como decimos en Valencia, lo que las fuerzas de izquierdas y nacionalistas os ofrecen es «arrancà de maxo i parà de burro«.
A la Associació Juristes Valencians me gustaría contestarles que en mi opinión personal:
- Ciudadanos fue, es y seguirá siendo partidario de la recuperación del derecho civil valenciano en la Constitución Española, lo cual no significa que el estado español deje de ostentar competencia alguna en materia civil, porque el derecho civil es fundamental para garantizar la igualdad entre todos los españoles. El estado español no puede permitir, por ejemplo, que una comunidad autónoma prohíba el matrimonio entre personas del mismo sexo con el pretexto de que no existía en el siglo XV.
- El discurso de Ciudadanos es idéntico en toda España, la diferencia fundamental estriba en la eficacia y capacidad de gestión del gobierno autonómico de turno, las cuales brillan por su ausencia en el valenciano, como acaba de demostrar la declaración de inconstitucionalidad de la Ley Valenciana de Custodia Compartida, que nació muerta. Si 5 comunidades autónomas tienen leyes de custodia compartida es porque sus gobiernos han sabido acordarlas y llevarlas a feliz término, no como el valenciano.
- Por mucho que Les Corts Valencianes apoyen una iniciativa para modificar la Constitución, esta propuesta se va a quedar en papel mojado, es más que evidente. Lo que intentan las fuerzas nacionalistas y de izquierdas es aprovechar la coyuntura e instrumentalizar a los afectados por los problemas de custodia para lograr sus objetivos políticos, que Ciudadanos no comparte.
Tiempo al tiempo, sabemos que los hijos se van haciendo mayores, que cada minuto cuenta, pero los afectados por custodia compartida tendrán su ley estatal, sus problemas se solucionarán y será en parte gracias a la insistencia de Ciudadanos, no de los vendedores de humo nacionalistas que lo único que quieren es arrimar el ascua a su sardina.