El tiempo pasa más rápido de lo que creemos y cuando nos demos cuenta la ciudadanía nos estará evaluando de nuevo. Las buenas nuevas que arrojan los sondeos no son mas que el reflejo del trabajo diario y las ganas por cumplir con todo aquello que la ciudadanía nos encomendó en su día.
Hace unos días recibimos en Burjassot la visita de Toni Cantó, a quién acompañamos en un recorrido por el mercado municipal mostrando una vez más nuestro apoyo e interés por el comercio tradicional y quienes lo mantienen vivo. Nuestros comerciantes, esas personas que abrieron sus persianas con valentía cuando nadie más se atrevía a hacerlo, son los grandes olvidados de las instituciones públicas, y en definitiva quienes con su constancia y esfuerzo levantan día a día el país, aún cuando lo tienen todo en contra.
Los autónomos, las personas emprendedoras, son la parte más importante del tejido productivo de nuestra sociedad y tenemos el deber apoyarlas en lugar de poner piedras en sus caminos. Los responsables públicos tienen en su haber el compromiso de servir a los ciudadanos, de facilitarles las cosas fomentando su desarrollo y no poniendo trabas e impedimentos por nimiedades y caprichos, como es el caso de la edil que rehusó a almorzar en un bar del municipio porque no le contestaron en la lengua que ella exigía sin demasiado atino o, la campaña por el mismo motivo contra una importantísima cooperativa valenciana que necesita apoyos y no enfrentamientos.
Un lugar al que también quisimos acercarnos durante la visita en señal de rechazo a esta discriminación, porque entendemos que cada uno es libre de utilizar la lengua que considere propia lejos de cualquier imposición. Y mientras continúen poniendo el foco en nuestras diferencias y priorizando sus intereses, lo realmente importante para la sociedad valenciana seguirá en un segundo plano, o sencillamente desaparecerá de la agenda.
Sin embargo, algunas personas seguiremos esforzándonos y apostando por esta gente de actitud heroica que lucha cada día por mejorar y salir adelante. Las cosas están cambiando, pero aún queda mucho por hacer, y mientras estemos aquí, seguiremos trabajando por lo que verdaderamente requiere de nuestra atención, porque solo así mantendremos la esperanza en que todo mejore algún día.