
La semana pasada conocimos el borrador de la Ley que prepara la Generalitat de Cataluña, que pretende «desconectarse» del resto de España y establecer de forma unilateral una especie de normativa transitoria.
Una vez leído el texto, saco dos conclusiones básicas. La primera es que ya están desconectados, pero de la realidad. Y la segunda, una vez eliminada toda la palabrería del texto, ¿saben qué queda? LA PELA, cómo no, el vil dinero.
Pretenden paralizar todas las investigaciones y procesos judiciales iniciados contra la CORRUPCIÓN institucionalizada del 3%. O sea, que al final lo que quieren es seguir robando con absoluta impunidad, y para ello recurren a todas las florituras independentistas posibles para desviar la atención de sus verdaderas intenciones.
Espero que Rajoy se dé cuenta que el «rajoyismo» (Arte de no hacer nada hasta que los problemas se pudran) no sirve, aterrice en la realidad y comprenda que su estrategia (por llamarla de alguna manera) no funciona, y se decida a meterse en política de verdad y tomar medidas contundentes.
De Podemos poco se espera, ya que están a favor de ese inexistente “derecho a decidir”, y el PSOE no sabe lo que quiere, ya que consideran el concepto de nación “discutido y discutible”. Desgraciadamente sólo queda Ciudadanos, que con Inés Arrimadas al frente, es la verdadera oposición a esta locura que parece no acabar nunca.
Tenemos que tener MUY CLARO que la proclamación unilateral de la República Democrática de Catalunya esconde el nombre real, que me permito la sugerencia de renombrarla «República Cleptocrática de Catalunya», sin duda nombre más ajustado a su realidad.
@Vicent_Raga