En 1865 publicaba el matemático inglés C.L. Dogson, bajo el seudónimo de Lewis Carroll, el genial libro “Alicia en el País de las Maravillas”. No puedo evitar recordar este relato cada vez que escucho hablar de la independencia de Cataluña. Siempre he visto la cara de Pujol en la reina de corazones, y hasta Puigdemont tiene cara de conejo con peluca huyendo a toda prisa del reloj de la Justicia. Como en “Alicia” han conseguido crear su propio universo fantástico, controlan los medios de comunicación y todo el tejido asociativo catalán y han conseguido un “Matrix” casi perfecto. Pero algo ha escapado de su control.
Este “algo” se llama REALIDAD.
Ahora todos los catalanes han podido ver de frente el verdadero rostro de una posible independencia: huida masiva de empresas, paralización de las inversiones, ningún reconocimiento internacional y certeza de quedar fuera de la Unión Europea. En definitiva, el ostracismo y la ruina para una sociedad moderna, abierta y avanzada. Lo que los catalanes, con su esfuerzo y dedicación, han conseguido en todo un siglo puede verse destruido en apenas un año.
Ahora entra en acción el segundo gran libro de Lewis Carroll, “Alicia a través del Espejo” o nuestra versión “Cataluña frente al Espejo”. Los catalanes deben de ser conscientes que están ante un momento crucial de su Historia, en definitiva están frente a su propio espejo. Seamos capaces de desmontar la gran mentira del nacionalismo catalán que pretende que creamos que sentirse catalán es incompatible con pertenecer a España (y a Europa).
Ahora no valen medias tintas ni mensajes ambiguos. Es el momento de la verdad. Diría más, la situación está incluso por encima de las siglas políticas. Ha llegado el momento del “seny”. Reflexionemos en voz alta: de todos los candidatos y candidatas que se presentan, ¿quién creen que sería capaz de sacar a Cataluña de esta parálisis en que está sumida y desmontar todas las estructuras improductivas e inútiles, con un mensaje claro y directo, sin ambigüedades? Sí, han acertado, Inés Arrimadas

Me voy a permitir el atrevimiento de hacer un llamamiento a tantos ex-votantes de la extinta CiU que no comparten las derivas de la independencia, a tantos votantes socialistas que no quieren indultos para políticos delincuentes ni se fían de los posibles pactos post-electorales de su partido con las “Colaus” y compañía, a tantos votantes del PP que tienen el convencimiento que en Cataluña el voto útil es Ciudadanos, que sean conscientes de lo que se juegan, en definitiva de lo que nos jugamos todos, y que se atrevan a votar a Inés Arrimadas.
Ha llegado el momento de los valientes. Quizá no tengamos otra oportunidad como ésta.
Si nos unimos podremos ganar las elecciones. Sin duda el triunfo de un partido no independentista rompería por completo el discurso soberanista, y supondría un hito histórico, y esto sólo lo puede conseguir Ciudadanos. Solo hace falta creérselo y acudir a votar en masa el 21 de diciembre. La historia nos observa, Cataluña y los catalanes estamos frente al espejo. Como diría John Lennon, demos una oportunidad a la paz, en definitiva, demos una oportunidad a Inés Arrimadas.